Las familias son una de las piezas fundamentales de la comunidad educativa, puesto que es la una institución multifuncional que realiza una serie de acciones muy importantes.
Bajo mi punto de vista, la familia es la primera escuela de los alumnos, ya que desde antes de ir a los centros escolares los padres enseñan a los alumnos multitud de aspectos. Por lo tanto, la escuela y las familias deben estar en continua comunicación.
La
comunicación que existe entre la familia de los alumnos y los docentes, a pesar
de ser un elemento fundamental, en muchas ocasiones no se lleva a cabo de
manera adecuada. En las citaciones entre padres y maestros se tiene que intentar crear un clima óptimo para el desarrollo
de la cooperación, de la confianza y de la colaboración entre ambas partes.
Para que estos encuentros se produzcan de manera exitosa, se tienen que
utilizar una serie de habilidades de relación y de comunicación básicas, tanto
verbales como no verbales.
En este vídeo que os pongo a continuación se van a desarrollar tres formas de
abordar estas tutorías, en función de las habilidades comunicativas básicas del
docente: modelo agresivo, modelo inhibido y modelo asertivo.
Modelo agresivo: se basa en una relación distante entre el
tutor y la madre del niño. El docente emplea un tono de voz elevado, realiza
gestos agresivos y en ningún momento se crea un buen clima de conversación.
También se puede apreciar que ambas personas no se respetan puesto que no
existen los turnos de palabra, se culpan unos a los otros y se prejuzgan. Por
lo tanto, en ningún momento llegan a un acuerdo.
Modelo asertivo: desde el primer momento el maestro intenta
crear un ambiente cómodo y acogedor, ya que le agradece a la madre su
presencia, siempre habla en términos positivos y afrontando la situación desde
el punto de vista de la madre. Por lo tanto, llegan a un acuerdo.
En mi opinión la participación de los padres en la actividad
educativa es fundamental para la educación de los alumnos. Para que las
tutorías sean eficaces, se tienen que poner en marcha las habilidades
comunicativas adecuadas.
Por ello,
pienso que el mejor método es el que se basa en el empleo de técnicas de
carácter asertivo. De esta manera se establece una relación entre los padres y
el tutor, facilitando la comunicación, e incluso dando lugar a que esta,
posteriormente, se convierta en una relación de colaboración y de cooperación.
Además, las tutorías no tienen como único fin informar a los padres acerca de
la situación académica en la que se encuentra su hijo, sino que también se
deben emplearse como un instrumento de mejora del rendimiento académico del
niño.
A través del método asertivo, la familia y el maestro
consiguen llegar a un acuerdo.
Por el contrario, bajo mi punto de vista el método agresivo
al basarse en una relación distante entre ambas partes la comunicación entre
los padres y el maestro se destruye completamente.
En conclusión, el mejor de los métodos es el asertivo y como
futura maestra es el que emplearía en mis tutorías con los padres, ya que es
del que se desprenden los resultados más positivos.
Bibliografía:
https://www.youtube.com/watch?v=dA1ogXCwHmI
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